El primer paso ha sido un acierto: Luis Enrique Martínez como entrenador. Muy ilusionante la llegada del asturiano al banquillo del Camp Nou. Esperemos que le acompañen los títulos. A Lucho se le tiene un cariño especial.
La equipación también ha sido otro acierto. La nueva camiseta, de estilo un poco retro, es muy bonita. Y lo mejor, el Barça recupera la segunda equipación naranja, la de Wembley'92. Bonita, ¿verdad?
Atrás queda la camiseta de "la senyera" que tan poca suerte nos ha traído. Parecíamos el Sant Andreu y eso se veía reflejado también sobre el campo.
Ahora falta el tercer paso, armar un equipo ilusionante. De momento Ter Stegen es el único fichaje, portero joven y del que hablan maravillas. Rafinha y Deulofeu vuelven tras sus cesiones. Dos jugadores que si no se les frena van para cracks mundiales. ¿Y ahora qué? Yo espero que vendan a Alexis y traigan al ansiado central, sea Marquinhos, Miranda o quien sea, pero un central.
Y mi deseo, aunque imposible, la convocatoria de elecciones por parte de Bartomeu, el ursupador del trono de hierro. Pero ahí me he pasado y el señor no está por la labor. ¡Qué bien se está de presidente!
Con ese lunar en el culo, hay mucha ilusión para la próxima temporada, y es que peor que la pasada no será. Esperemos.
Paz con vosotros.
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